Atlético Uruguay consiguió ayer, en Concordia, tres puntos vitales por donde se los mire. Para acomodarse en la tabla, para tranquilizar al menos por una semana un clima muy enrarecido y para darle confianza a la dupla técnica con el trabajo que está realizando.
Atlético necesitaba ganar y lo hizo pero sufriendo hasta lo impensado ante un equipo que tiene tantos o más problemas que el Decano.