El Decano llegaba al Núñez con la ventaja obtenida siete días atrás en el Plazaola con el gol en los minutos finales de Pedro D´Angelo y le servían dos resultados para quedarse con la Copa: el triunfo o el empate. En el Lobo estaban todas las obligaciones ya que la competencia se definía por puntos y debía ganar para forzar la definición desde los doce pasos.
Fue para el Decano
El empate en un gol le permitió a Atlético Uruguay quedarse con la Copa Amistad "Luis Echevarría". El pitazo final de Vereda desató la alegría de los jugadores decanos que una vez recibido el trofeo se fueron a festejar de cara a su gente que se ubicó en buen número en la cabecera norte del estadio.
Para seguir apostando
La Copa Amistad se organizó rápidamente entre ambas instituciones que hace tiempo estaban buscando darle forma a una competencia de este tipo, pero que los desiguales inicios de torneo hacían imposible. Esta vez el extenso parate del fútbol argentino facilitó las cosas y permitió que los uruguayenses puedan volver a ver a los clásicos equipos de la Histórica disputando un trofeo que en esta ocasión quedó en manos del Decano.
Una experiencia para guardar en las retinas por lo observado en ambas canchas y para seguir apostando a su concreción en el próximo verano, cuando seguramente volverá a ser recepcionada con el mismo interés de los miles de uruguayenses que se acercaron en ambos partidos a las canchas.
